Julie Aigner-Clark & The Baby Einstein Brand
Julie Aigner-Clark empezó haciendo videos en casa para su pequeña hija Aspen y sin darse cuenta, crearía una de las marcas internacionales de productos multimedia para bebés más populares del mundo: The Baby Einstein Brand.
“Era yo, literalmente poniendo play en la Betacam y arrastrando un gato de juguete por la mesa con una caña de pescar”- dijo Julie durante una entrevista
“Era yo, literalmente poniendo play en la Betacam y arrastrando un gato de juguete por la mesa con una caña de pescar”
Su creación tuvo gran acogida por sus amigos ya que Julie había encontrado una manera libre de culpa de entretener a sus hijos, mientras mujeres como ella, tomaban una ducha, atendían una llamada por teléfono, o simplemente querían tomar 5 minutos más de siesta.
“Soy una madre a tiempo completo. Se lo que nos gusta mirar y también escuchar. Creo que fue un instinto que tuve como madre” – ,Julie Aigner-Clark, fundadora de Baby Einstein"
Toda su familia le dijo que estaba loca por querer invertir sus ahorros en la producción de videos para bebés. Pero, la idea de Baby Einstein y la producción del video fue la parte fácil y que más disfrutaba Julie. Sin embargo, encontrar distribuidores, llegar a sus consumidoras potenciales y administrar su negocio fue lo que representó un reto para ella.
"No sabía nada acerca de marketing”- dijo la creadora de una marca que valdría millones de dólares."
Aigner-Clark investigó a los minoristas potenciales y decidió que la fundación de niños: The Right Start era una opción perfecta para la comercialización de sus videos. Sería capaz de controlar sus precios y evitar que la marca Baby Einstein se perdiera en los estantes de los grandes distribuidores de libros, videos o productos para bebés.
“En los negocios, como en la vida, muchas veces mas vale ser cabeza de ratón que cola de león.”
Sin embargo, The Right Start no tuvo interés. Julie no se rendiría tan fácilmente y tomó un vuelo a la feria anual de juguetes de Nueva York en 1997. Literalmente, camino por toda la feria, entre las 1500 marcas, buscando al delegado de la fundación. Cuando finalmente lo encontró, le dijo: “Tienen que ver este video, es demasiado perfecto para su tienda”.
Julie logró obtener un acuerdo verbal inicial, pero desafortunadamente, la persona a cargo con la que había hablado abandonó la fundación al poco tiempo. Julie no se desanimó y mantuvo una determinación inquebrantable durante semanas contactándose con el nuevo encargado, hasta que finalmente viera sus cintas infantiles.
El encargado de The Right Star aprobó la comercialización de Baby Einstein en 10 locales como prueba piloto. Las ventas fueron exitosas. Al poco tiempo empezaron a vender los videos alrededor de todo el país. Cuatro meses tras haber lanzado su primer video, la fundación llamó a Julie y le pidió que hiciera más.
La compañía operó totalmente en base al flujo de caja y nunca asumió ninguna deuda. Bill Clark, el esposo de Julie afirma que el flujo de efectivo constante permitió que Baby Einstein tenga una gran ventaja competitiva en el mercado y en sus vidas. “Siendo nosotros mismos nuestros propios socios, no teníamos que rendir cuentas a nadie. Podíamos administrar nuestro tiempo como queríamos y ser independientes con la compañía”.
La posibilidad de crear un solo video, y venderlo a miles de personas les hizo darse cuenta del poder del apalancamiento en ventas, algo que es de suma importancia para el crecimiento empresarial. Un modelo de negocio con liquidez tiene, en esencia:
“Dentro de 5 años, Baby Einstein pasó de ser una pequeña distribuidora de videos entre amigos a una gran compañía de medios que fue vendida en el 2001 a Walt Disney Company por un estimado de 25 millones”